miércoles, marzo 24, 2010

Rafael Junchaya interpretado en USA por Thelema Trio

Me encuentro de gira por Estados Unidos con Thelema Trio, una gran aventura musical que durará hasta el 10 de abril. Hoy día empezamos los ensayos para nuestro primer concierto en la Universidad de Kansas, como parte de la Conferencia Regional de Compositores Americanos (SCI), en donde somos el ensamble invitado.

Como parte de nuestro tour, la obra "Tres danzas episkénicas" de Rafael Junchaya la interpretaremos en varias ocasiones, empezando este jueves 25 en el auditorio de la Universidad de Kansas.

"Tres danzas episkénicas" fue compuesta por Junchaya en el 2005 y ha sido grabada por Thelema Trio para el sello Innova Recordings (USA) que justamente promovemos en esta gira. Esta obra ya la hemos tocado en Estados Unidos, pero en esta oportunidad la tocaremos en varios estados de este país del norte. Por cierto, el disco también incluye mi obra para clarinete solo "Imprevisto" que dediqué años atrás a Mario Alvarado.

En caso quieran leer una nota más personal, voy a escribir un reporte diario con fotos y anécdotas sobre este viaje en mi blog.
Felicitaciones Rafael, y gracias por escribir música que afecta tan positivamente a un público internacional!!

Marco Antonio Mazzini

lunes, marzo 22, 2010

Rostros de Circomper: María Alejandra Castro


A continuación un breve retrato hablado de María Alejandra Castro

1. ¿Cómo te iniciaste en la música? ¿Por qué elegiste convertirte en compositor?

Provengo de una familia muy poco musical, a pesar de que una tía muy querida fue pianista. Ella me sentaba al piano y tocaba y cantaba conmigo, desde pequeñita. Yo creo que aquellas tardes, sentada al piano, me dejaron mucho sentido y oído para la música. De niña hasta mis 20 seguí clases de piano. A pesar de que me encantaba la música y el piano, no tenia nunca la idea de volverme pianista. Pero si quería crear obras. Hasta quise ser directora de teatro. Desde mis 17 comencé a crear musicalmente, es decir, tocando mis propias improvisaciones. Hasta mis 20 años no sabia que existía un estudio de composición. Pero cuando supe, y escuche la música de Boulez, Messiaen, Stockhausen, Cage, en fin ‘los grandes’ supe que esa música era la que quería escribir, escuchar y vivir.

Si elegí por ser compositora?... Lo que me acuerdo es que quise saber como escribir música, como dominar ese lenguaje y poder expresarme en ello. Y, sin querer queriendo, me volví compositora.

2. ¿Qué compositores admiras y/o te han influenciado?

Messiaen (piezas de órgano, Harawi, pero casi todo de el..), Ligeti (concierto de piano y violín, unas de mis favoritas, pero también su Grand macabre, increíble como su música comunica de manera teatral sin volverse pictórica; y sus estudios de piano…!!), Boulez en sus piezas de los 50-60 (definitivamente Le marteau sans maitre, Rituel), Berio (Circles, Linea, Sinfonia, Laborintus II, etc). Pero también Gubaidulina- una de las pocas mujeres en esta historia escrita mayormente por hombres. Unas de sus primeras piezas que me fascinaron es para 2 fagotes. Maravillosa! Es un Bach contemporáneo. Pero, también me encanta escuchar a nuestra Chabuca, y me sorprendo y me fascina y la envidio, como los músicos que la acompañan, y quisiera cantar y tocar el cajón como ellos.

3. ¿Cómo describirías tus composiciones? ¿Cuáles son las características de tu lenguaje compositivo?


Esta es la pregunta mas difícil. Creo que mis piezas pueden ser muy diversas, y mi lenguaje es la diversidad. Y me gusta. Pero, mi manera de trabajar es casi siempre la misma, y eso hace que habrán muchos puntos en común. Se manifiestan en melodías, secuencias en la armonía, ciertos gestos y curvas de tensión relativamente cortas. Últimamente estoy explorando mas el pulso, mientras hace 7 años componía mas en texturas. Pero todo puede cambiar ;-)

4. ¿Qué es más importante para ti al componer: la emoción o la técnica?

En general no hablo en términos de emoción. Pero en términos de atmósferas o expresión. ‘Emoción’ me suena demasiado subjetivo, y en el proceso de composición trato de ser lo mas objetiva que pueda, para no perderme. Esto no significa que compongo intuitivamente, pero trato de lograra lo que me propuse. La técnica es, y cito mi profesor Klaas de Vries, el resultado de la expresión. Cuando la expresión esta clara, la técnica resulta naturalmente desde ella. Allí esta la búsqueda.

5. ¿En qué obra(s) estás trabajando actualmente?

Una pieza de órgano (marzo 2011) y una obra para música teatro (nov 2010)

6. ¿Cual crees que es el papel de los compositores en nuestra sociedad?

Yo creo que cada uno crea su función. Pero idealmente, claro, el compositor debería estar con dos piernas en la sociedad. A pesar de que el proceso de componer requiere también que puedas meterte en tu cueva, pues si no, para la mayoría de nosotros, no pasa nada.
Lo que yo noto, acá en Holanda, donde la música clásica contemporánea es relativamente activa y con un publico pequeño pero estable, es que aun, ‘la gente’ piensa en compositores como personas que ya murieron hace 200 años. Es una gran sorpresa que esos fósiles todavía existen y crean música clásica contemporánea. Creo que eso podría cambiar, podríamos exponernos más, explicar sobre nuestra música más. Hablar sobre música es contradictorio, pero en nuestro sector sumamente importante.

7. ¿Cual crees que es el futuro de nuestra música?

Yo creo que siempre habrá música de compositores/ músicos que buscan un lenguaje propio, en todos los géneros..

domingo, marzo 14, 2010

En Memoria de Edgar Valcarcel


El pasado jueves 11 de Marzo falleció el compositor peruano Edgar Valcárcel a los 77 años de edad. Valcárcel fue uno de los compositores más importantes de nuestro país, de una reconocida solvencia técnica y grandes contribuciones a la vida musical peruana, la incursión de la vanguardia musical en Latinoamérica y la fusión de la música clásica occidental con la música andina.


La noticia ha sido publicada en los diarios El Peruano, El Comercio, Peru21 y Expreso. También los medios Radio Programas del Perú , Presencia Cultural y Agencia Andina de Noticias comentaron el hecho.

Lo fundamental sobre la perdida del maestro está dicho en los artículos enlazados en el párrafo anterior. Sólo quisiera añadir, desde mi experiencia personal en el medio musical peruano, algunos comentarios cuyo contenido quizás no esté incluído en las notas arriba señaladas.

La primera vez que ví al maestro fue dentro de unas clases de armonía y contrapunto en una escuela de música ubicada en Pueblo Libre. Me impresionó mucho su dominio del piano, tocaba de memoria pasajes de Bach o Chopin con frecuencia para ilustrar los ejemplos de sus exposiciones.

Unos meses después ingresé al Conservatorio Nacional de Música. Entonces conocí una faceta controversial del maestro. Valcárcel había sido el anterior director del Conservatorio, y su salida se había producido tras cuestionamientos a su desempeño por parte de una porción del personal de la institución. Al interior de un sector del Conservatorio había, en esos años, una actitud crítica al respecto del trabajo de Valcárcel como director. El maestro, por otra parte, se sentía dolido por los cuestionamientos, y mantuvo en adelante un distanciamiento con el Conservatorio.

Varios años después, ya concluidos mis estudios en el conservatorio, tuve la oportunidad de escribir un capítulo en un libro publicado en homenaje al compositor peruano César Bolaños, y por la naturaleza de ese trabajo aprendí mucho sobre la historia de la música clásica contemporánea en el Perú durante las decadas del 50, 60 y 70. Una figura recurrente en esa historia, un constante animador de su generación y generaciones posteriores es Edgar Valcárcel. Interprete, compositor, conferencista, productor, ensayista, investigador. El maestro desarrollo en algún momento actividad dentro de cada una de esas facetas, en un contexto en que la sociedad peruana se interesaba muy poco, o casi nada, por la producción de la llamada música académica. La contribución de Valcárcel ha sido grande e importante.

La última vez que ví al maestro fue durante un encuentro entre el y los jóvenes compositores peruanos organizado por Luca Belcastro, en el cual tomé la foto que se aprecia al inicio de esta nota. Gozaba de buen humor y aparente buena salud. En esta ocasión pude conocer mejor sus planteamientos al respecto de su trabajo y su relación con la sociedad peruana, y en particular la sociedad Limeña.

Edgar Valcárcel proviene de una familia prominente de Puno. En su juventud debe haber gozado de las mejores condiciones educativas y materiales a su alcance. Su llegada a Lima en la década de los 50s, en contraste, lo enfrenta al racismo y la marginación que hoy aun son características de nuestra sociedad, y que en la década del 50 tenía niveles mayores.

La obra de Edgar Válcarcel está impregnada por una constante afirmación de su identidad indígena. Las técnicas contemporáneas son usadas frecuentemente para plasmar una cierta aspereza y agresividad. Su música, quizás, ha sido una expresión de resistencia ante una sociedad que nunca lo aceptaría completamente, al margen de los logros profesionales, los reconocimientos internacionales, los homenajes recibidos. O quizás no. Me consta al menos, por su exposición en el encuentro mencionado, que vivía en una casa a medio construir en una de las zonas más exclusivas de Lima, que era hostigado por algunos de sus vecinos, que se sentía humillado por ello.

Y ahora que ya no está con nosotros ha llegado el momento de poner las cosas sobre la balanza. A lo largo de este texto he querido exponer mi impresión de Edgar Valcárcel como ser humano, incluyendo sus méritos pero también sus debilidades. Como cualquiera de nosotros, el maestro también estuvo expuesto a temores y equivocaciones, y el recuerdo de algunos de sus tropiezos pueden haber sido el subtexto de los sucesos de la semana pasada. Quizás ello sea expresión de nuestras propias debilidades. En todo caso, desde toda perspectiva llegaremos al mismo consenso: la obra de Edgar Válcarcel es una gran contribución a la cultura peruana. No sólo por sus composiciones, sino también por su espíritu de lucha, su perspectiva nacionalista, su deseo de vivir en una sociedad más justa.

Por el trabajo realizado, y por su guía para construir un Perú mejor, mil gracias, maestro Válcarcel.